lunes, 25 de enero de 2010

A ras de suelo

Hace un par de semanas, mientras bajaba por Cercados de Espino de vuelta de Soria, me adelantó esta pareja. Yo bajaba por ese falso llano a unos 37km/h a ritmo sostenido. El aire de cara y mis piernas castigadas durante la subida me dejaron estancado a esa velocidad. Al rato me pasan estos dos. El tirando y ella a rueda. Eleve mi velocidad hasta alcanzar su rebufo para bajar más rápido y cómodo...
Durante varios kilómetros me quede flipado del ver rodar esa bici de 3 ruedas. ¡A 43km/h nos llevaba este señor con la fuerza de sus brazos! Fuimos unos cuantos kilómetros así hasta que ella me hizo señas de que se apartaba a un lado. Estaba reventada. Yo apreté un poco más y me puse a rueda del triciclo. Fue entonces cuando flipé de verdad. Iba con la bandera literalmente en mi nariz, justo entre los cuernos del manillar y alucinando de ver y sufrir la potencia de aquellos musculados brazos.
Seguíamos a esos 43 por hora. ¡Pero en este momento ya no iba a rueda de nadie! El triciclo va literalmente a ras de suelo y cuando vas detrás te das cuanta de que no ganas nada yendo a rueda. No te "corta" el aire. Casi me revienta el tío a mi también...

Hice de tripas corazón para adelantarlo e imprimir un ritmo superior durante un rato y así poder sacar una foto. El debió bajar la velocidad lo justo para que su acompañante llegara.

Una experiencia bastante curiosa...


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Alucinante. (Alberto)

meloki dijo...

Yo tambien lo pense, por eso pense que merecia ponerle una nota aqui...